martes, 5 de abril de 2016

El último día en el que dije adiós



Imagino que el tiempo se cargará de razones e imagino también que la razón se encargará de que pase el tiempo, pero siempre tendré la sensación de que todo pasó demasiado lento, de que a veces el mundo gira a velocidades aleatorias que nunca controlaré, que los días de lluvia son despedidas que se asumen por goteo y pierden la consistencia del ahora porque empujamos más adelante las esperanzas; que hoy no, que hoy no toca, que hoy es agua, y sofá y manta, y algo caliente y ser uno mismo.

Llevo unos meses sin ser yo, me he convertido en alguien que no sé quién es. Me gustaría poder abrir la cáscara y ver qué hay en el interior del personaje que he acabado por asumir. No sé si esto perdurará o se irá diluyendo a medida que el proyecto del agua se haga más y más grande. Me pregunto si aún me iré convirtiendo en otra persona más, además de la que soy en realidad o en ese otro que ahora soy y no sé quién es.

De lo que sí estoy seguro es que volar es algo que me da miedo. Iba a decir "que me perturba", pero sería suavizarlo. Tengo miedo, no un miedo irrefrenable, sino uno de baja intensidad y que trata de decirme que me esconda para cuando se pongan las cosas realmente mal.

Supongo que esa es la película de mi vida: esperar el gran golpe que definitivamente acabe con mis esperanzas.

Pero hoy llueve, los días de lluvia no deberían ser aptos para escribir en el blog.

Cada vez más rodeado de gente.

Cada vez más cómodo en mi pequeño mundo.

Y el tiempo se ralentiza y digo adiós con la mano como desde un barco de vela un día sin viento...



Tengo miedo del mundo que viene. La expulsión de refugiados me deja descolocado, la guerra, los niños...

... empiezo a estar muy harto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Toni,
NO estés harto...
Ayer me dijo una amiga..."El universo es perfecto"
Se me caló la frase en el cuerpo entero.
Piensa en unos mezcales, piensa que en lo que te has convertido es en alguien que hace algo para salvar vidas, muchas vidas, tal vez incluso, incluida la mia.
Te mando besos desde este lado del mar.

S.