Pero creo que igual todo esto tiene un sentido.
Un sentido inimaginable
o un sinsentido.
No sé.
Quizá
Me estoy volviendo loco.
Tarde o temprano tenía que ocurrir.
El otro día me crucé con Santi Balmes en la Plaça Universitat. Aclaro que eso no es una coincidencia, simplemente una anécdota... pero pasaba el 16 y en el Mundo deportivo de ese, se podía leer algo inquietante... si juntabas las palabras esdrújulas de los segundos párrafos de las páginas impares con los monosílabos unidos como el movimiento del caballo de ajedrez de la tercera página empezando por la esquina de abajo.
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