domingo, 17 de abril de 2011

María


Abro la bolsa con disimulo por si me han seguido y me están observando. Está dentro de la bolsa tal y como me había prometido María. Está dentro sea lo que sea eso que brilla. Por un instante pienso si no será material radioactivo. "Te dejas influir demasiado por las noticias" me dice con sarcasmo el bicho.

Repaso mentalemnte las instrucciones, estoy seguro de que algo se me pasa, no soy demasiado bueno recordando secuencias de cosas. No tengo buena memoria, eso es todo. Me puede la ansiedad de tener que recordar, me puede este cerebro de corcho, esta caja de serrín a medio cerrar que llevo encima de los hombros.

Voy en busca del coche. Antes de acercarme a él vuelvo a mirar en todas direcciones. En las series de la televisión los polis americanos lo llaman "el perímetro", me hace gracia eso de "el perímetro". Todo despejado, eso también lo dicen. Me acerco al coche y subo, dejo la bolsa en el asiento de al lado y enciendo el motor. Salgo sin ningún problema, nadie me sigue. Cuando he recorrido un par de kilómetros me detengo al lado de una acera dejando el motor en marcha. Cojo el teléfono móvil y llamo a María. Descuelga a la tercera llamada. Está sola, me dice.

_ ¿Qué se supone que es esto que he ido a buscar? _ le pregunto.

_ ¿Has abierto la bolsa?_ pregunta

_ ¿Tú qué crees? _ le digo mirando por el retrovisor la retaguardia de "el perímetro".

_ Es un Aleph _ me dice ella.

- ¿Un Alep?

_ Se pronuncia como si tuviera una efe final_ me corrige.

_ ¿Y qué se supone que es? _ no me gusta aquello que no sé qué es. Si su respuesta no me satisface el Aleph acabará en el fondo de un barranco. No quiero problemas con la poli y si Garr y sus amigos también lo están buscando es que o debe valer mucho dinero o puede proporcionarlo.

_ Es como una especie de concentración del conocimiento humano, solo que físico.

_ ¿Cómo wikipedia? _ le digo en coña.

María se queda en silencio durante unos diez segundos en los que pienso que he dicho una estupidez de las gordas.

_ ¿Sabes que El libro de arena o La Biblioteca infinita de Borges son dos conceptos que casan totalmente con Internet? Borges fue director de la biblioteca nacional a pesar de sus problemas de vista. Su concepto de infinito aplicado al conocimiento fue un gran adelanto, pocas personas lo han sabido ver.

_ Sí, y el Gran Hermano y Facebook son dos piezas del mismmo puzzle. Teorías como esas las hay a patadas. ¿Para qué sirve el Aleph?

_ No sirve para nada y al mismo tiempo lo es todo ¿no te parece increíble? Es el infinito hecho finito. Es una paradoja y las paradojas no tienen precio porque escapan a la mente humana.

_ Bueno, están los Haikus.

_ No tiene nada que ver un Haiku con el Aleph que llevas en esa bolsa. Lo que llevas ahí es real.

Me pregunto qué hace un matón de medio pelo como yo con el conocimiento infinito metido en una bolsa de plástico sobre el asiento del copiloto de un viejo coche, parado en la calle de un suburbio de una ciudad en decadencia.

_ ¿Cómo lo conseguiste?_ le pregunto.

_ Me lo dio mi padre antes de morir.

_ Creí que tu padre vivía.

_ Mientras exista el Aleph él seguirá vivo. No espero que lo entiendas... cada avance científico, cada descubrimiento que hace la humanidad se incorpora al instante a ese punto brillante. Ahí está la información de todo, de todas las personas que han pasado por este planeta, estamos tú y yo... y está mi padre y, aunque te parezca imposible, a través de él, puedo hablar con él como si estuviera vivo. Es algo difícil de explicar.

_ Está bien_ le digo_ ¿Dónde nos encontramos? Esta mierda me está poniendo nervioso. Te lo doy y...

_ Y te irás. ¿Me dejarás sola con los hombres de Garr pisándome los talones?

_ Nunca te dejaré sola. Sabes que puedes contar conmigo, es solo que... esta vez siento como que tú no quieres seguir huyendo, que estás cansada de huir y estás cansada de mí. Tengo una sensación extraña, María. Tengo la sensación de que esta vez no voy a poder protegerte porque te muestras demasiado.

_ Como siempre tienes razón. Tú y tus intuiciones. Estoy cansada de huir de Garr, es cierto. Me gustaría que me llevaras muy lejos, donde no pudieran encontrarnos pero cuando más pasa el tiempo más me doy cuenta de que ellos están por todas partes.

_ Tenemos el Aleph, una nevera portátil y una botella de vermouth casero, nos quedan casi trescientos mil euros de los que conseguí de Carmen. Tenemos todo el mundo para escondernos. Me tienes a mí. Te tengo a ti.

_ Pasa a buscarme, tenemos que salir de esta ciudad, tarde o temprano sabrán nuestro paradero. Asegúrate de que no te siga nadie. Y no vuelvas a abrir la bolsa.

_ No le abras la puerta a nadie.

2 comentarios:

Las Espirales de Brígida dijo...

Me gusta eso del vermouth, y la pronunciación de "alef", pero no entiendo que tienen que ver los haikus...

Es algo muy diferente a lo que te he leído.

Muy techno, jaja, ciencia ficción, pero con toques muy "moriría por ella"...

Daltvila dijo...

Me alegro muchísimo por tí y me gusta la frescura,
... bis